DIARIO DE SAN JOSÉ
Legación de España y a veces sala de patinaje / Casa de la familia Álvarez Melgar
Como suspendida en el tiempo, se encuentra en la esquina de avenida 9 y calle 3A de barrio Amón, la casa que perteneció al abogado y vicecónsul español Dr. Mariano Álvarez Melgar.
“Acá vivieron mis tíos y mis abuelos. Mi tío era el Dr. Manuel Álvarez Iraeta y su papá fue Mariano Álvarez Melgar. Mariano era un abogado que vino de España, fue muy activo entre sus compatriotas, lo que contribuyó para que, hacia 1912, fuera nombrado vicecónsul de España en San José y por eso, por muchos años en el antejardín, ondeó el pabellón de su país”, contó Margarita Tinoco.
La casa fue construida aproximadamente en el año 1910, tiene un estilo poco visto en Costa Rica, de origen hispano-musulmán que se denomina “NeoMudéjar”. Los enormes espejos en algunas zonas del interior de la casa, eran elementos que se consideraban de mucha modernidad en su época y que le daban un aire suntuoso.
La oficina del padre tenía privacidad e independencia del resto de la casa, condición necesaria para recibir a sus múltiples visitantes, que en muchas ocasiones eran extranjeros, puesto que la residencia era la sede de la legación española. También, constantemente se celebraban recepciones y actividades sociales.
El zaguán se extendía a lo largo de la casa y permitía una diferenciación sutil entre el espacio público y privado. A sus lados se localizaban la oficina, los dormitorios, el comedor, la sala, el patio interno y los demás aposentos.
La familia estaba conformada por los padres y cuatro hijos. Las niñas se agrupaban en una habitación y los niños en otra. Pero, en algún momento, en la casa convivieron con los abuelos maternos y paternos.
“Esta fue la casa de toda la familia, acá estaban los abuelos Álvarez y los abuelos Cañas, los tíos y todos los chiquillos. La casa era un punto de encuentro para almorzar y jugar. El zaguán era un sitio muy especial cuando estábamos niños, porque nos encantaba patinar y esa era nuestra sala de patinaje”, recordó Margarita con gran alegría.
El área de servicio y la cocina se encontraban al fondo, diferenciadas y separadas del resto de la casa. Y después del temblor de 1924, la residencia se amplió. Actualmente la casa pertenece al señor Mariano Álvarez Cañas, nieto de Mariano Álvarez Melgar.
Agradecimiento:
Agradecemos a Margarita Tinoco y a Roberto Peñaranda por la apertura de la casa para las fotografías y por su aporte a la historia y a la cultura de la ciudad capital.
Historiadora, Valeria Ramírez Roldán, Departamento de Cultura
Periodista, Carmen Edgell Matus, Comunicación Institucional